miércoles, 15 de junio de 2016



Desaparece la primera especie de mamífero por cambio climático
SIDNEY, Australia.- Los expertos consideran que un pequeño roedor australiano es el primer mamífero del planeta que desaparece a causa del cambio climático provocado por los seres humanos, publica hoy la prensa local.
El animal, cuyo nombre científico es Melomys rubicola, habitaba en el cayo Bramble, una diminuta isla que se eleva a tres metros del nivel del mar en el Estrecho de Torres, que separa Australia y Papúa Nueva Guinea.
La existencia de este roedor, considerado el único mamífero endémico de la Gran Barrera de Coral, fue registrada por los europeos en 1845 en el cayo Bramble, donde abundaban.
No obstante, una expedición reflejó en 1978 la reducción del número de ejemplares a solo unos cientos, hasta que en 2009 la especie fue vista por última vez.
“Probablemente esto representa la primera extinción de un mamífero causado por el cambio climático antropogénico (provocado por el hombre)”, apunta un informe científico publicado en el portal del gobierno del estado australiano de Queensland.
Hace dos años un equipo del Ministerio del Ambiente y Protección del Patrimonio del estado australiano de Queensland y la Universidad de Queensland realizó una investigación en busca de algunos de los ejemplares, sin lograr avistarlos.
Natalie Waller y Luke Leung, autores del informe gubernamental, recomendaron que se declare extinto al roedor del cayo Bramble.
Los expertos añadieron que la “raíz de la causa” de su desaparición es el aumento del nivel de las aguas que inundaron el cayo exterminando a toda la población y destruyendo su hábitat.


miércoles, 1 de junio de 2016



Una red de empresas alemanas planea sacar de los mares parte de las millones de toneladas de plásticos con ayuda de un sistema industrial que quieren poner en marcha a partir de 2018.
El plan prevé que una flota de barcos reformados con redes retiren del mar los plásticos en zonas especialmente afectadas por este tipo de basura, que luego será procesada en un barco especial. La basura se empleará para generar energía o será reciclada.
Los expertos estiman que existen 140 millones de toneladas de plástico en los mares y que esta cifra se incrementa anualmente en hasta diez millones de toneladas. Una vez en el mar, la basura permanece allí durante siglos.
Debido a la fricción, el agua salada y la radiación solar, las partes de plástico se hacen cada vez más pequeñas y acaban llegando a la cadena alimentaria humana a través del pescado. Los pescadores y el turismo padecen igualmente los estragos de la basura.
Un ejemplo de la dimensión de estos residuos se puede encontrar en Brasil donde sólo en la costa entre Río de Janeiro y São Paulo se vierten en el mar anualmente 70.000 toneladas de plástico. En parte, la basura es arrastrada desde los vertederos al mar cuando se producen fuertes lluvias.
Sólo para luchar contra esta cantidad habría que tener allí de manera permanente nueve barcos para recolectar la basura y uno para procesarla.
La red formada por diez empresas alemanas afecta a un total de 192 países, cuyas costas tienen que hacer frente a este tipo de contaminación. De manera especial destacan China, Indonesia, Filipinas y Vietnam. El problema también se encuentra en Alemania, donde anualmente llegan al mar del Norte y al mar Báltico 20.000 toneladas de plástico.